A partir de ese día Lucas se convirtió en mi gran apoyo, en mi mejor amigo, en mi soporte, cada vez que pude mirar atras con ganas de retroceder el me ayudaba a recapacitar y seguir con mi decisión. Cuando ella me mando un mail diciéndome Nunca es tarde, estuvo a poquísimo de volver, pero hablé con el y me dijo: "Ale, si ella realmente te quisiera como tú a ella, no te habría enviado un simple mail, eso es muy fácil, te hubiese buscado donde estés, y ella sabe donde ubicarte y hubiese hablado contigo frente a frente, mirándote a los ojos."
Y con mucho dolor le di la razón. Nunca más iba a aceptar migajas de cariño.
Cada vez que estuve en Lima, llamaba a Lucas e iba a visitarlo, o nos encontrábamos en algun centro comercial cerca y hablábamos... mucho. Escucharlo y escucharme mientras hablo con él es todo un descubrimiento. Él es capaz de sacar a relucir pensamientos que nunca pensé tener, es como si conversara con mi propia conciencia. Aunque realmente a veces nisiquiera estando sola puedo avanzar tanto. Cuando viene a mi ciudad, en sus vacaciones, nos buscaba a las dos, y sólo por ese día hacíamos el esfuerzo de volver a reunirnos los tres y salir a caminar, claro que no era lo mismo, bromeaba con Lucas nada más y ahí empezaron las bromas de "Tu sabes que eres la mujer de mi vida, Ale", jaja y yo le seguía el juego.
Ayer fui a buscarlo a su casa, y conversamos más de tres horas seguidas en una banquita, al principio de cosas sin relevancia, su vida en Lima, sus anécdotas, de algunos padrecitos, las chocolatadas navideñas, etc. Hasta que me contó que había ido a casa de ella a conocer a su bebe y saludarla. Me interrogó. Me hizo caer en cuenta que hace más de cuatro meses que no la he visto, para nada. Y que no me he acercado a conocer su nena. Me dijo que no entendía, porque había dejado de lado mis amigos para enfocarme en mi trabajo. Me preguntó: ¿No te sientes sola?. Y como siempre, me hizo pensar. Y a él no le puedo mentir.
A veces. En realidad es producto del estrés y del ritmo acelerado que llevo. Me encanta mi trabajo, pero a veces he caído en semanas en que nisiquiera he querido salir de mi casa, o que he viajado a algún valle cercano para alejarme de todo y pensar en mi. A veces me afecta, Lucas, pero siempre puedo reponerme. Tu sabes, cuando ella se casó y salió embarazada fue un shock completo, tuve que reorganizar mi vida.
- Pero claro, debió ser muy duro, Ale. Perdiste tu otra mitad, tu pareja, perdiste una pierna!
(Creo que ni yo misma pude haberlo descrito mejor)
Si, pero he aprendido a caminar con una sola pierna, Lucas. Y ahora estoy bien. Reorganicé mis prioridades, estoy centrada en mi familia, realmente ellos son mi fuerza, en esos momentos en que estoy mal y nisiquiera quiero salir de mi cama, ellos han estado conmigo y he aprendido a valorarlos como el centro de mi vida, antes no. La pasé muy mal, estuve muy abajo, tu sabes... si yo salía era con ella, viajaba con ella, a la disco con ella, de compras con ella, dormía con ella. Me quedé: ¿Y ahora a donde voy, con quien voy? Pero creo que por ahora, mi otra pierna es mi familia y mi trabajo. Estoy enfocada en mis metas, y luego me encontraré con mi otra mitad.
- Está bien Ale, pero no dejes de lado tu vida por enfocarte mucho en trabajar.
Créeme, estoy bien, mucho mejor que antes.
- ¿Para cuando quedamos? Yo te voy a acompañar a visitarla y que conozcas su bebe. Ya que no haz podido ir sola. No te puedes negar.
Y me sacó fecha y hora. Este lunes en la noche la veré de nuevo, y conoceré su bebe. Espero que se parezca a su mamá. Y espero no sentir nada cuando la vea.
PD: Este chico siempre me deja pensando!
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