Había hecho PLAY a olvidarla, hasta que me llame. Plop! Yo sabía que esa semana iba a estar sola en casa, en el fondo, se me ocurrió que por no estar sola me iba a llamar. Pero no, se conectó a inter y ahí estaba yo. Como siempre.
- Ale! Q haces? Q me vas a invitar?
Conversamos un ratito, me preguntó si iría al centro, dudé unos minutos. Hay alguna diferencia en llamarme por teléfono o por msn? En ese momento me pareció que no. Ja!. Y fuí a verla. PAUSE a olvidarla. Y nuevamente estaba ahí con ella. Acompañándola, esperándola (sí me hizo esperar!), cargándole el bolso (sí, también), sonriendo por su sonrisa, aunque el bolso estaba pesado, planté a Carlos, la invité a comer (si, también!).
Luego de comer fuimos a su casa, en el camino sentí frío, y ella muy calurosa y la mas linda, me dió su chompa. Acaso no es linda? Caminamos sujetadas del brazo, rozamos nuestras manos de casualidad, por el frío me acurruqué a ella, y así hasta que llegamos. Directo a su cama. A dormir jajaja. Si pues, ni modo no?. Nos abrigamos, y conversamos mucho, mucho. Temas externos a nuestra relación, temas personales, familiares, de negocios. Me sentí tan bien hablando con ella como antes, observándola mientras me escuchaba, escuchándola mientras me observaba. Los treinta centímetros que nos separaban eran de hielo, pero era la distancia perfecta para reparar en cada detalle de ella, mi preciosa. Su rostro no es el de sus quince años pero es perfecto, de hecho bromeamos sobre sus supuestas arrugas, sus ojos son increíbles, su mirada no puede ocultar la ternura q aún conserva, aunque trate de no hacerlo. Sus labios son tan dulces, que no podía evitar imaginar como sería derretir esos treinta centímetros de hielo que nos separaban. Pero me contuve, debía hacerlo; si lo hice durante tantos años, que mas daba unas horas más.
Y el tiempo se pasó volando, la tomé de la mano y la entrelacé con la mía, mientras acariciaba sus brazos, pasando mis dedos con delicadeza haciéndole cosquillas. Cómo le gusta! Pero no dijimos nada. Sólo nos quedamos en silencio. Yo mirándola, admirando su belleza y enfocándome en sus labios. Ella dejándose observar y mirándome, lo sentí. Los nervios no me dejaron ver en que se enfocaba! Pero eran minutos de silencio, de sólo mirarnos. Malditos treinta centímetros de hielo!
- Que hora es?... Las 10 de la noche! Queeeeeeee? Me tengo que ir! (Teniendo en cuenta que vivo al otro lado de la ciudad, a una hora de viaje, era tarde! El tiempo se pasó volando)
- No, no Ale, no te vayas, No me dejes, no me abandones mala! (Que hagooo? si me lo dice así?)
- Me tengo que ir, niña, es tarde.
- No, quédate conmigo, estamos tan abrigaditas, afuera hace frío y no te voy a prestar abrigo porque te vas a quedar conmigo! Llamemos a tu casa.
- Uhmmm....
- Por favor.
- Ya! =D (Ella sabía que no me iban a poner trabas en casa para quedarme con ella. Mis papás la quieren mucho)
Y con ella me quedé. Sentí ilusión, si me hace quedarme es por algo no?. No creo que sólo sea por tener compañía. Y quién esta allí? Yo, como siempre. Conversamos y nos miramos un rato mas, me invitó fruta picada, y eso cenamos. Me prestó ropa de dormir y nos acostamos... a dormir. No pude, estuve como una hora observando y velando sus sueños. Es mas linda cuando duerme. Y nada más. Al siguiente día despertamos, yo primero. Nos alistamos, ella tenía que trabajar y yo que regresar a mi casa, la acompañé a q tome el bus y luego me fui. Y ya. Nada más.
- Ale! Q haces? Q me vas a invitar?
Conversamos un ratito, me preguntó si iría al centro, dudé unos minutos. Hay alguna diferencia en llamarme por teléfono o por msn? En ese momento me pareció que no. Ja!. Y fuí a verla. PAUSE a olvidarla. Y nuevamente estaba ahí con ella. Acompañándola, esperándola (sí me hizo esperar!), cargándole el bolso (sí, también), sonriendo por su sonrisa, aunque el bolso estaba pesado, planté a Carlos, la invité a comer (si, también!).
Luego de comer fuimos a su casa, en el camino sentí frío, y ella muy calurosa y la mas linda, me dió su chompa. Acaso no es linda? Caminamos sujetadas del brazo, rozamos nuestras manos de casualidad, por el frío me acurruqué a ella, y así hasta que llegamos. Directo a su cama. A dormir jajaja. Si pues, ni modo no?. Nos abrigamos, y conversamos mucho, mucho. Temas externos a nuestra relación, temas personales, familiares, de negocios. Me sentí tan bien hablando con ella como antes, observándola mientras me escuchaba, escuchándola mientras me observaba. Los treinta centímetros que nos separaban eran de hielo, pero era la distancia perfecta para reparar en cada detalle de ella, mi preciosa. Su rostro no es el de sus quince años pero es perfecto, de hecho bromeamos sobre sus supuestas arrugas, sus ojos son increíbles, su mirada no puede ocultar la ternura q aún conserva, aunque trate de no hacerlo. Sus labios son tan dulces, que no podía evitar imaginar como sería derretir esos treinta centímetros de hielo que nos separaban. Pero me contuve, debía hacerlo; si lo hice durante tantos años, que mas daba unas horas más.
Y el tiempo se pasó volando, la tomé de la mano y la entrelacé con la mía, mientras acariciaba sus brazos, pasando mis dedos con delicadeza haciéndole cosquillas. Cómo le gusta! Pero no dijimos nada. Sólo nos quedamos en silencio. Yo mirándola, admirando su belleza y enfocándome en sus labios. Ella dejándose observar y mirándome, lo sentí. Los nervios no me dejaron ver en que se enfocaba! Pero eran minutos de silencio, de sólo mirarnos. Malditos treinta centímetros de hielo!
- Que hora es?... Las 10 de la noche! Queeeeeeee? Me tengo que ir! (Teniendo en cuenta que vivo al otro lado de la ciudad, a una hora de viaje, era tarde! El tiempo se pasó volando)
- No, no Ale, no te vayas, No me dejes, no me abandones mala! (Que hagooo? si me lo dice así?)
- Me tengo que ir, niña, es tarde.
- No, quédate conmigo, estamos tan abrigaditas, afuera hace frío y no te voy a prestar abrigo porque te vas a quedar conmigo! Llamemos a tu casa.
- Uhmmm....
- Por favor.
- Ya! =D (Ella sabía que no me iban a poner trabas en casa para quedarme con ella. Mis papás la quieren mucho)
Y con ella me quedé. Sentí ilusión, si me hace quedarme es por algo no?. No creo que sólo sea por tener compañía. Y quién esta allí? Yo, como siempre. Conversamos y nos miramos un rato mas, me invitó fruta picada, y eso cenamos. Me prestó ropa de dormir y nos acostamos... a dormir. No pude, estuve como una hora observando y velando sus sueños. Es mas linda cuando duerme. Y nada más. Al siguiente día despertamos, yo primero. Nos alistamos, ella tenía que trabajar y yo que regresar a mi casa, la acompañé a q tome el bus y luego me fui. Y ya. Nada más.
♫♫Y tú juegas conmigo y
por las noches quieres
que sea tu abrigo ♫♫
PLAY a olvidarte.
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